Como inversores, muchas veces somos responsables de pensar en ciertos tipos de cestas de activos en vez de tomar una visión más amplia del universo de inversión. Sin embargo, tomar una visión transversal de varios activos cruzados puede permitir opciones de inversión y partidas más inteligentes.
Tomemos como ejemplo los bonos High Yield y la renta variable estadounidense: Mientras que existen muchas similitudes en sus características, también hay claras diferencias– siendo la principal la distinción por clase de activo. Y dentro del mundo de la inversión, las cestas de clases de activos tienden a ser inflexibles.
Pero al observar las características de riesgo-rendimiento, los bonos High Yield y las acciones son mucho más similares de lo que la mayoría imaginan y podrían ser vistos como clases de activos que compiten entre sí. Tanto, que podríamos decir que los bonos High Yield deberían ser considerados como una alternativa a la renta variable, pero con una volatilidad menor.
Los bonos High Yield estadounidenses frente a la renta variable estadounidense: La volatilidad es el elemento diferenciador
En 2019 los bonos High Yield estadounidenses obtuvieron una rentabilidad del 14,41% 1. En comparación, el S&P 500 obtuvo una rentabilidad del 31,48% durante el mismo período 2. Sin embargo, si nos fijamos en un horizonte temporal mayor, los bonos High Yield estadounidenses mantuvieron en gran medida el mismo ritmo que la renta variable, mientras que obtuvieron menores caídas durante períodos de volatilidad. Por ejemplo, durante la crisis financiera de 2007/2008, la mayor caída del índice de bonos High Yield estadounidense, el ICE BofA ML High Yield fue de -33,23% en comparación con el -50,95% obtenido por S&P 500 3.
Aunque la renta variable estadounidense batió al mercado de High Yield en 2019, durante los últimos 20 años los bonos High Yield estadounidenses batieron al S&P 500 (7,01% frente a 6,33% anualizado). Y mientras que la correlación entre los bonos High Yield y la renta variable es extremadamente alta (0,65 durante los últimos 20 años), existen diferencias significativas en las volatilidades subyacentes de ambas – haciendo que los bonos High Yield estadounidenses sean notablemente menos volátiles: 8,96 en comparación con 14,53 de la renta variable 4.
Para generar retornos con la renta variable, se necesita un crecimiento de beneficios o una expansión del múltiplo. Sin embargo, como inversor en bonos High Yield, su retorno será más fiable ya que proviene del pago del cupón y las tasas de impago no se acercan ni de lejos al pico de 2009 en el que llegaron a ser del 12,1% o de su máximo de 2016 que fue del 4,3% 5. Las expectativas para 2019 están en el 2,9%, con un aumento esperado al 3,0% en 2020, ambos permanecen por debajo de la media a largo plazo del 3,4%.
Las elecciones estadounidenses, el Brexit y la incertidumbre económica
Mirando hacia 2020, existen numerosos motivos para esperar mayor incertidumbre. Por un lado, las elecciones estadounidenses de 2020 crearán algunas turbulencias a lo largo del año, lo que podría
tener un impacto negativo en la ya tensa relación comercial entre China y Estados Unidos. Además, el Brexit no está aún resuelto y de acuerdo con nuestras perspectivas económicas mundiales de 2020 en la mayoría de las economías desarrolladas y Asia, el producto interior bruto está previsto que crezca en 2020 a un ritmo menor que en 2019.
Teniendo esto en cuenta, generar retornos con la renta variable a partir de la expansión del múltiplo y el crecimiento de los beneficios parece ser más difícil que conseguir cobrar los cupones de los bonos de alto rendimiento. Por lo tanto, debemos considerar los bonos High Yield como una alternativa a la renta variable para su cartera a lo largo de 2020, para obtener retornos similares a la renta variable con una volatilidad significativamente más baja.
[1] Fuente: ICE BofA ML US High Yield index.
2 https://markets.businessinsider.com/index/historical-prices/s&p_500/1.1.2019_31.10.2019
3 Fuente: Morningstar.
4 Fuente: eVestment Analytics, ICE BofA US High Yield index y S&P 500. Datos de los últimos 20 años a 31 December 2019.
5 Fuente: J.P. Morgan, Indicador de Impagos, 2 de enero 2019. Tasa de impagos de los bonos High-yield a largo plazo desde 1997, tasa de impago de los préstamos apalancados desde 1998