Las dinámicas de oferta y demanda parecen explicar mejor que la geopolítica lo que ha pasado recientemente en el mercado petrolero.
No lea mucho sobre los recientes incrementos en el precio del crudo.
Las tensiones geopolíticas están aumentando nuevamente. Al mismo tiempo, el precio del crudo se incrementa. ¿Una coincidencia? ¿Está el mercado petrolero dando por hecho una escalada de tensión en Oriente Medio?
Una manera de analizar la fluctuación en el precio del crudo es observando las dinámicas de la oferta y la demanda. En nuestro “Gráfico de la Semana”, mostramos la demanda física del petróleo menos la oferta, tal y como publicaba el Departamento de Energía de EE.UU., junto con la evolución del precio del crudo durante los últimos doce meses.
En 2014, la oferta empezó a superar ampliamente la demanda. El precio reaccionó como consecuencia de ello, bajando de los más de 100 dólares por barril a menos de 30 dólares a principios de 2016. En los últimos 12 meses, sin embargo, la demanda física ha superado a la oferta. Los inventarios están disminuyendo y los precios aumentando.
Por lo tanto, incluso en ausencia de una escalada de tensión geopolítica, el precio del petróleo parece estar bien soportado donde está. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que los datos de posicionamiento indican que el mercado está preparado para un alza de la cotización. Adicionalmente, la producción en EE.UU. ha estado expandiéndose nuevamente. Estos factores hacen improbable que el precio se dispare.
(Gráfico de la gestora de fondos de inversión DWS (DE:DWSG))