Por Rania El Gamal
DUBÁI, 1 abr (Reuters) - El suministro de crudo de Arabia Saudí subió el miércoles a un récord de más de 12 millones de barriles por día (bpd), dijeron dos fuentes de la industria, pese al desplome de la demanda causado por el brote de coronavirus y la presión de Estados Unidos sobre el reino para que deje de inundar el mercado.
El martes expiró un pacto global de recorte de suministros, levantando las restricciones al bombeo de los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Rusia y otras naciones productoras.
Arabia Saudí había dicho que sus exportaciones de petróleo se ubicarían cerca de los 10 millones de bpd, pero no dio señales de cuánto crudo dejaría almacenado.
Una de las fuentes, que habló bajo condición de conservar su anonimato, dijo que Aramco incrementó su producción a su capacidad máxima, de 12 millones de bpd.
El suministro al mercado, tanto a nivel local como para la exportación, podría diferir de la producción dependiendo de los volúmenes extraídos del almacenamiento. Arabia Saudí tiene cientos de millones de barriles de crudo almacenados dentro del reino y en el extranjero.
La compañía nacional petrolera Saudi Aramco (SE:2222) declinó hacer comentarios.
El plan de Riad para impulsar su producción y su suministro al mercado desafía la creciente presión de Washington para poner fin a una guerra con Rusia por la cuota de mercado.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el martes que se sumaría a Riad y Moscú si es necesario para hablar sobre el desplome de los precios del crudo, que a los niveles actuales exprimirá a los productores de más alto coste, sobre todo de esquisto estadounidense, que ha disfrutado de un auge en los últimos años.
Más tarde en el día, Trump dijo que cree que los dos países trabajarán en los próximos días para allanar sus diferencias sobre el bombeo de petróleo.
El Departamento de Energía dijo que una carrera por la cuota de mercado en un momento de caída de la demanda es "frustrante" y "no representa el tipo de planeamiento deliberativo que nos gustaría ver en unos socios, al tiempo que no logra avances en nuestro interés compartido por unos mercados estables".
Legisladores estadounidenses han adoptado una postura dura, refiriéndose a la posibilidad de una acción legislativa si Riad no reduce su producción petrolera de forma voluntaria.
Los referenciales petroleros cerraron el volátil primer trimestre con sus mayores pérdidas de la historia. El miércoles, el barril bajó hasta cerca de 25 dólares, tras tocar su nivel más bajo en 18 años.
El martes, una fuente saudí de la industria dijo a Reuters que Aramco pidió a compañías de servicios energéticos que apoyen sus planes de aumento de bombeo a su capacidad máxima de 12 millones de bpd desde el 1 de abril "en un futuro próximo".
El gigante petrolero estatal también pidió a las compañías de servicios que "tengan disponibles los recursos requeridos, incluida la fuerza laboral y los equipos" para ayudar a elevar su capacidad a 13 millones de bpd, según la fuente.
No obstante, las autoridades saudíes deben explicar aún cómo podrán aumentar tanto los envíos cuando las estrictas restricciones de movimiento para contener el coronavirus están destruyendo la demanda y subiendo las tasas de carga, lo que es un elemento disuasivo para potenciales compradores.
Arabia Saudí ha tenido problemas para hallar clientes para su crudo extra, dijeron fuentes de la industria, erosionando los intentos del reino para ganar cuota de mercado.
(Información adicional de Timothy Gardner en Washington; editado en español por Gabriela Donoso y Carlos Serrano)