Por Rik Sharma
MADRID (Reuters) - El Barcelona de Ernesto Valverde logró el sábado un récord en la Liga con 39 partidos invictos al vencer al Valencia, pero el entrenador podría arriesgarse a perder la oportunidad de ampliarlo el martes cuando su equipo se enfrente al Celta de Vigo ante la inminencia de la final de Copa.
El Barcelona disputará contra el Sevilla el próximo sábado la final de la Copa del Rey en Madrid y, después de haber jugado con el equipo completo contra el Valencia, Valverde debe decidir si deja descansar a los jugadores clave contra el Celta.
El entrenador no ha alternado mucho, utilizando a jugadores clave en todos los grandes partidos si estaban en forma, tal vez contribuyendo a la debacle en cuartos de final de la Liga de Campeones en Roma, donde perdió la ventaja de tres goles del partido de ida y fue eliminado por la AS Roma.
Lionel Messi y Gerard Piqué llevan arrastrando molestias, mientras que Sergio Busquets volvió apresuradamente tras una fractura en un dedo del pie. Ivan Rakitic espera volver al campo para jugar contra su exequipo, el Sevilla, después de fracturarse un dedo.
El Barcelona tiene 11 puntos de ventaja sobre el Atlético de Madrid en la liga a falta de seis partidos y la tentación para muchos entrenadores sería utilizar a jugadores suplentes contra el Celta y darle a las grandes figuras un descanso para la final de la Copa.
Sin embargo, Valverde dijo que la aplastante derrota por 3-0 ante la Roma le llevó a elegir a un equipo fuerte ante el Valencia para superar el récord de 38 partidos invictos de la Real Sociedad, establecido en 1980.
"Con estos jugadores, es normal lograr estos récords ahora y antes y los seguirá batiendo", dijo Valverde.
"Era un partido fundamental en muchos sentidos. Primero, porque ahora nos quedan siete puntos para ser campeones. Segundo, por la racha del rival, que está haciendo una grandísima temporada. Sabíamos que, de ganar hoy, nos quedarían por conseguir 7 puntos de 18 posibles".
"Además, por la semana en que venimos, que sabemos que somos un entorno, un club, depresivo, y teníamos que refrenar esto y poner la cara después de lo del otro día".
Para mantener la moral, Valverde podría elegir un equipo fuerte contra el Celta, en cuyo estadio el Barcelona ha sufrido derrotas en las últimas dos temporadas, concediendo cuatro goles en ambas ocasiones.