BARCELONA, 18 oct (Reuters) - Cientos de miles de manifestantes ondeando banderas independentistas al grito de "independencia!" y "libertad presos políticos" se congregaron en Barcelona el viernes en el quinto día de protestas tras la condena a nueve líderes separatistas.
Muchos de los manifestantes comenzaron su camino a la capital catalana el miércoles desde municipios de toda la región, después de que el Tribunal Supremo sentenciara a nueve separatistas a hasta 13 años de cárcel por el intento fallido de independencia en 2017.
La sentencia desencadenó la peor violencia callejera que se ha visto en España en décadas, y las protestas del viernes, que también incluyen a los que han secundado la huelga general, serán vigiladas de cerca por las autoridades de Madrid.
"Durante toda esta semana se han venido produciendo como bien saben, incidentes violentos en Cataluña. Protagonizados, como no dejamos de repetir, por grupos minoritarios pero muy organizados", dijo el ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska en una conferencia de prensa. "Su actuación, como ya hemos dicho también, no quedará impune".
El viernes, los manifestantes, desde familias empujando cochecitos hasta ciclistas con sus bicicletas, se apoderaron de varias autopistas y de otras arterias de comunicación mientras caminaban pacíficamente hacia la capital catalana, muchos de los cuales portaban lazos amarillos como signo de protesta contra el encarcelamiento de los líderes independentistas catalanes. En Barcelona, algunos se paraban a un lado de la carretera, aplaudiendo a los manifestantes al llegar.
Los manifestantes que caminaban por una carretera hacia Barcelona llevaban una pancarta gigante en inglés: "Liberen a los prisioneros catalanes ahora".
Varias calles principales de Barcelona fueron cerradas al tráfico en previsión de las marchas. Los trenes regionales y el metro de la ciudad funcionaban con un horario reducido después de que los sindicatos independentistas convocaron una huelga.
La Sagrada Familia de Barcelona, diseñada por Antoni Gaudí, fue clausurada debido a las protestas, dijo un representante a Reuters.
La Federación Española de Fútbol (RFEF) decidió el viernes aplazar el partido de liga entre el Barcelona y el Real Madrid que debía disputarse en la capital catalana el 26 de octubre.
VUELOS CANCELADOS
El aeropuerto de El Prat de Barcelona canceló 57 vuelos el viernes, dijo el operador aeroportuario AENA (MC:AENA), después de verse obligado a cancelar alrededor de 150 vuelos esta semana por las protestas.
El Ayuntamiento de Barcelona dijo que 700 contenedores de basura fueron incendiados desde que comenzaron las protestas del lunes y estimó que la ciudad había sufrido daños por un total de más de 1,5 millones de euros (1,67 millones de dólares).
El jueves comenzó con protestas muy pacíficas en las que los jóvenes, ataviados con banderas catalanas, lanzaban pelotas y saltaban la cuerda. El ambiente cambió conforme avanzó la noche, con los manifestantes prendiendo fuego a las sillas de los cafés que se sitúan en la moderna calle Rambla de Catalunya, en el corazón del distrito turístico.
Una portavoz del Ayuntamiento de Barcelona dijo que el jueves se quemaron unos 10 árboles.
Los Mossos de Esquadra dijeron que 16 personas fueron detenidas en toda Cataluña por los disturbios el jueves, mientras que las autoridades sanitarias dijeron que se prestó asistencia médica a 42 personas.
El fabricante de automóviles Seat, una unidad de Volkswagen (DE:VOWG_p) AG, dijo que había detenido la producción en su planta de Martorell, cerca de Barcelona, desde el jueves por la tarde hasta el sábado, por temor a que las marchas interrumpieran el tráfico, dijo una portavoz de la compañía.
El mercado mayorista de Barcelona, MercaBarna, dijo que las visitas a sus puestos de venta de pescado bajaron un 85% el viernes, mientras que los vendedores de flores en el mercado vieron un 90% menos de clientes.
Los líderes independentistas siguieron adelante con un referéndum sobre la independencia en 2017, a pesar de ser considerado ilegal por los tribunales españoles, seguido de una declaración de independencia de la región. Madrid respondió tomando el control de la administración catalana y juzgando a los cabecillas.
El exlíder catalán, Carles Puigemont, que huyó a Bélgica tras el intento de independencia fallido, dijo el viernes a los periodistas que las autoridades belgas le habían permitido permanecer en libertad sin fianza después de que el Tribunal Supremo de España emitiera una órden de detención europea.
(Información de Jose Elías Rodríguez, Clara-Laeila Laudette, Emma Pinedo y Paola Luelmo in Madrid, Andrea Ariet Gallego en Gdansk; Marine Strauss en Bruselas; escrito por Ashifa Kassam y Ingrid Melander; editado por Andrei Khalip y Toby Chopra; Traducido por Andrea Ariet en la redacción de Gdansk)