Por Colin Packham y Paulina Duran
SÍDNEY (Reuters) - El príncipe británico Enrique escaló el viernes el puente de la bahía de Australia, acompañado del primer ministro Scott Morrison (LON:MRW), durante un viaje que rompió con la rutina formal de este tipo de eventos al involucrar a la pareja real en un abrazo grupal en la playa Bondi.
Enrique y Morrison sonrieron mientras la bandera negra, gris y amarilla de los Juegos Invictus se izaba en el sitio histórico de Sídney en la víspera del evento internacional paralímpico, fundado por el príncipe para los militares heridos en combate, que se celebran hasta el 27 de octubre.
"Bien hecho, Enrique. Es fantástico para todos los veteranos", dijo la usuaria de Facebook (NASDAQ:FB) Angela Doggett en la página de la red social de la compañía que organiza las escaladas.
Previamente, Enrique y su esposa, Meghan Markle, se unieron a un abrazo grupal en la playa Bondi, en un evento organizado por surfistas para crear conciencia sobre temas de salud mental.
"Enrique dijo que cada uno de nosotros experimentará problemas de salud mental en alguna etapa de la vida", dijo Charlotte Connell, una de las participantes en el círculo, a la agencia Associated Press australiana.
Enrique, quien ha admitido que buscó ayuda pocos años antes de cumplir 30 para lidiar con el duelo de su madre Diana, sirvió en el Ejército británico y hace campaña para que los soldados reciban la ayuda para la salud mental que necesiten.
El príncipe, con una guirnalda de flores azules alrededor de su cuello, y Meghan, con una rosa, escucharon a los oradores del círculo durante unos minutos antes del abrazo grupal.
Enrique, quien vistió pantalones color caqui y una camisa azul, y Meghan, que lució un vestido que le llegaba hasta los tobillos, se sacaron los zapatos para sentarse con miembros del grupo comunitario OneWave, cuyos miembros vistieron camisetas coloridas y guirnaldas de flores.
Enrique sirvió en el Ejército británico durante 10 años, entre ellos dos períodos en Afganistán, y ahora trabaja con varias organizaciones caritativas, que incluyen algunas de apoyo a los soldados heridos.
Junto con su hermano, el príncipe Guillermo, y su esposa Catalina, Enrique también estableció una organización caritativa de salud mental.
Enrique y Meghan, quienes ocasionalmente se tomaron de las manos y posaron con una tabla de surf, están realizando su primera gira internacional desde que se casaron en mayo. La pareja también visitará Nueva Zelanda y las islas de Fiji y Tonga, en el Pacífico Sur.
En un paseo por Bondi, la pareja, que espera su primer hijo para la primavera boreal, saludó y posó para los fotógrafos mientras miles de personas se acercaban a verlos, sacarles fotos y grabar videos con sus teléfonos.
(Información de Colin Packham; Editado en español por Lucila Sigal)