BBVA: ¿Cambia lo sucedido en Turquía su tendencia alcista?

 | 23.03.2021 10:13

Turquía es un claro ejemplo de lo poco que gusta a los mercados que los gobiernos intervengan en los asuntos de los Bancos Centrales. Pero vayamos por partes, ¿qué ha sucedido, por qué, a qué mercados afecta y qué consecuencias tiene?

Erdogan cesó al gobernador del Banco de Turquía, el cual había procedido el pasado jueves a subir los tipos de interés 200 puntos, el doble de lo esperado por el mercado, hasta el 19%. Este movimiento tenía como finalidad controlar la inflación, que se acercaba al 16%, y evitar que continuase la fuga de capital extranjero.

Pero estos ceses o despidos no son algo extraño en Turquía. De hecho, Erdogan en los últimos cinco meses ha cambiado a dos gobernadores de la entidad. Pero es que si vamos más atrás en el tiempo, desde el año 2014 ha cesado a 4 gobernadores, casi nada.

¿Y por qué este último despido? Pues porque Erdogan siempre ha estado en contra de las políticas monetarias clásicas y es un claro opositor a subir tipos de interés, él piensa al contrario que los cánones y comenta que para controlar una elevada inflación es mejor bajar los tipos de interés, cuando realmente es lo contrario y así hizo el Banco de Turquía.

¿Todo esto puede originar un cambio de paradigma en Turquía? Bueno, se podría decir que el nuevo gobernador podría seguir una política monetaria más cercana a lo que desea Erdogan y proceder a bajar los tipos de interés e implementar una política más expansiva.

¿Y por qué han reaccionado tan mal los mercados nacionales y los relacionados con Turquía? Pues porque si hay una cosa que los mercados detestan es la intromisión de los poderes políticos en los asuntos de los Bancos Centrales, ya que ello resta, por no decir que anula, la plena independencia de estas entidades. Y en el caso de Turquía tenemos un claro ejemplo de libro, un presidente que no comparte ni comulga con las decisiones del Banco del país e interviene cuando le place cesando a sus diversos gobernantes hasta encontrar uno que le siga el juego.