Dólar digital: ¿Qué dilata su desarrollo?
Andy Hecht | 20.12.2021 17:02
Este artículo fue escrito en exclusiva para Investing.com
- Un año dorado para las principales criptomonedas
- Blockchain es el futuro de la tecnología financiera
- El dólar sigue siendo la moneda de reserva mundial
- Avances en un dólar digital
Durante 2021, China ha estado probando una versión beta de un yuan digital. Aunque todavía no se ha implantado oficialmente, en noviembre el minorista electrónico chino JD.com (NASDAQ:JD) anunció que aceptaría el e-CNY para el pago en su plataforma durante el Día de los Solteros. Según los informes, hasta el 11 de noviembre más de 100,000 clientes habían utilizado la versión digital de la moneda.
Países de todo el mundo han estado hablando de planes para adoptar la tecnología financiera mediante el despliegue de monedas digitales. La Reserva Federal y el Tesoro de Estados Unidos han estudiado los pasos necesarios para digitalizar el dólar. En una de sus conferencias de prensa posteriores al FOMC, el presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo a los mercados que el factor más crítico para un dólar digital es "hacerlo bien".
Pero las agencias gubernamentales se mueven a paso de tortuga. Estados Unidos es ya una economía digital en muchos aspectos, ya que las tarjetas de crédito y débito han sustituido al efectivo. Pagar a través de los teléfonos inteligentes es otro método que ha ganado aceptación. Cada vez hay menos gente que lleva dinero en efectivo, y las monedas han perdido importancia.
Mientras tanto, el aumento de los precios a causa de las presiones inflacionistas hace que resulte difícil creer que la mayor denominación estadounidense en circulación sea el billete de 100 dólares. Es sólo cuestión de tiempo que EE.UU. lance un dólar digital. Aun así, la primera economía del mundo parece ir por detrás de otros países a la hora de adoptar la tecnología financiera.
Un año dorado para las principales criptomonedas
Al 17 de diciembre, aunque Bitcoin y Ethereum, los líderes de las criptodivisas, experimentaron retrocesos bajistas en sus gráficos diarios el 10 de noviembre -lo que provocó una reducción de los precios-, todavía registraron impresionantes ganancias en 2021.
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Fuente: Barchart
El gráfico anterior muestra que Bitcoin cerró el año 2020 en el nivel de 28,986.74 dólares. A 46,632.96 dólares el 19 de diciembre, la criptomoneda líder subió un 60.9% en 2021.
Fuente: Barchart
El gráfico muestra que a Ethereum le fue incluso mejor, subiendo de $738.912 millones el 31 de diciembre de 2020, al nivel de $3,905.221 el 19 de diciembre de 2021. Ethereum se ha multiplicado por 5.28 este año.
Mientras tanto, la capitalización de mercado general de la clase de criptoactivos estaba en el nivel de 767.482 millones de dólares a finales del año pasado. Con 2,203 billones de dólares el 19 de diciembre, se multiplicó por más de 2.87 veces, superando al Bitcoin pero con un rendimiento inferior al del Ethereum este año.
La conclusión es que la clase de activos ha aumentado su masa crítica. Si bien el crecimiento es probablemente una señal de la disminución de la fe en una variedad de criptodivisas, también es un comentario sobre el aumento de la tecnología financiera mundial, que sustituye al statu quo financiero.
Aunque las criptodivisas cuentan con un número creciente de partidarios, también tienen una serie de detractores. Las emociones están a flor de piel cuando se trata de esta emergente clase de activos. Las monedas globales con valores determinados únicamente por la compra y la venta en el mercado de las criptomonedas, quitan poder a los gobiernos y a los bancos centrales que pueden aumentar o disminuir la oferta monetaria para estimular o inhibir el crecimiento económico.
La evolución de la revolución de las criptomonedas ha creado una división ideológica que enfrenta al libertarismo con el apoyo al control gubernamental y bancario tradicional de los ámbitos financieros nacionales y mundiales.Blockchain es el futuro de la tecnología financiera
Aunque puede haber una división emocional en torno a las criptomonedas, existe un consenso generalizado sobre blockchain. Un blockchain es un sistema de registro de información que hace difícil o imposible cambiar, hackear o engañar a la red. Cada bloque de la cadena contiene un número de transacciones, y cada vez que se produce una nueva transacción, se añade un registro de la misma al libro contable de cada participante.
La tecnología Blockchain fue esbozada por primera vez en 1991 por Stuart Haber y W. Scott Stornetta, dos investigadores que buscaban implementar un método para evitar la manipulación de las marcas de tiempo de los documentos. Blockchain y las criptomonedas van de la mano, ya que el manual original de Bitcoin, escrito por el escurridizo Satoshi Nakamoto, ideó la primera base de datos blockchain.
Como la tecnología blockchain se describió en 1991, está claro que precedió a las criptomonedas. Sin embargo, los tokens digitales la han convertido en la columna vertebral de las finanzas a medida que las cadenas de bloques mejoran la velocidad de las transacciones y la eficiencia del mantenimiento de registros. Las empresas y los gobiernos han invertido un enorme capital en la adopción de la tecnología financiera y de la cadena de bloques en los últimos años.
El dólar sigue siendo la moneda de reserva del mundo
El dólar estadounidense es la moneda de reserva del mundo, lo que significa que los bancos centrales, los gobiernos y las autoridades monetarias de todo el mundo mantienen la moneda estadounidense como reserva. Estas monedas son libremente convertibles, estables y reflejan el panorama económico del país que emite la moneda de curso legal.
Al igual que todas las monedas nacionales en circulación hoy en día, el dólar estadounidense es una moneda fiduciaria, lo que significa que su valor proviene únicamente de la plena fe y crédito de los Estados Unidos de América. El gobierno puede aumentar o disminuir la oferta de dólares para hacer frente a los cambios económicos. Los gobiernos tienden a cooperar en los mercados de divisas en aras de la estabilidad. Intervienen de forma rutinaria, comprando o vendiendo dólares, euros, yenes, libras y otras divisas para evitar una volatilidad extrema, ya que el sistema mundial de pagos depende de la estabilidad de los tipos de cambio.
La tecnología ha cambiado la mayoría de los aspectos de nuestra vida en las últimas décadas. Hoy en día, menos personas llevan dinero en efectivo y cambio en el bolsillo; pagan los bienes y servicios con tarjetas de crédito y débito. Además, es imposible utilizar billetes y monedas para pagar productos de comercio electrónico.
Avances en la creación de un dólar digital
La Reserva Federal de Estados Unidos ha estado estudiando la creación de un dólar digital. Lael Brainard, recién nombrada vicepresidenta de la Fed, ha pedido al banco central que desarrolle urgentemente una moneda digital estadounidense. En julio, dijo:
"No puedo entender por qué Estados Unidos no está desarrollando activamente una moneda digital del banco central cuando China y otros países sí lo están haciendo".
Sin embargo, la secretaria del Tesoro de EE.UU., Janet Yellen, sigue indecisa. Recientemente dijo:
"Veo tanto los pros como los contras de hacerlo. Y mi propia mente no está decidida al respecto".
Aunque la Reserva Federal ha estudiado el potencial de un dólar digital, no ha habido un progreso real en la adopción de fintech y la evolución de la revolución tecnológica y financiera. Puede que Estados Unidos sea el país más rico y con la moneda fiduciaria más influyente, pero la falta de progreso y consenso es preocupante, ya que otros países están a punto de lanzar monedas digitales.
Las operaciones con instrumentos financieros o criptomonedas implican un elevado riesgo, incluyendo la pérdida parcial o total del capital invertido, y pueden no ser adecuadas para todos los inversores. Los precios de las criptomonedas son extremadamente volátiles y pueden verse afectados por factores externos de tipo financiero, regulatorio o político. Operar sobre márgenes aumenta los riesgos financieros.
Antes de lanzarse a invertir en un instrumento financiero o criptomoneda, infórmese debidamente de los riesgos y costes asociados a este tipo operaciones en los mercados financieros. Fije unos objetivos de inversión adecuados a su nivel de experiencia y su apetito por el riesgo y, siempre que sea necesario, busque asesoramiento profesional.
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