El problema que pueden tener los clientes de los “roboadvisors”

 | 11.11.2021 09:27

Cuando las principales bolsas del mundo suben todas a la vez y sobre todo cuando la que más sube es la norteamericana, es relativamente fácil obtener resultados positivos en una cartera de fondos.

Así todos los años se puede marcar la diferencia, aumentando la inversión en determinados sectores, activos o países que lo hagan mejor que los grandes índices. Por ejemplo, en 2020 el sector tecnológico (índice NASDAQ) superó a los grandes índices. También lo hizo China. Y este año lo hacen el sector financiero, las materias primas, la energía, determinadas industrias, etc. Que, por cierto, tienen y han tenido una fuerte presencia en las carteras recomendadas por Nextep.

Pero cuando de verdad se notará la diferencia entre limitarse a seguir a un índice grande o tomar decisiones de inversión va a ser a partir de ahora. Sobre todo si vamos a un escenario de mayor crecimiento y mayor inflación.

¿Y por qué decimos que se echará de menos en las carteras gestionadas por robots o sistemas automatizados? Pues porque esos sistemas parten de la base de que lo único que hay que tener en cartera son los grandes índices. El problema es que no siempre son los mejores en el corto y medio plazo. De hecho, en los próximos años podría “tocar” que ocurra lo contrario.

Para empezar, hay periodos en los que quien invierte en un gran índice mundial se pasa tiempo perdiendo o sin obtener rentabilidad. No es algo extraordinario. Lo vemos en el gráfico. El principal índice mundial, el SP 500, no siempre aporta plusvalía a quien invierte en él. Vemos como en un 10% de ocasiones en los últimos 50 años la rentabilidad a 10 años ha sido negativa. Por ejemplo entre 1973 y 1982 o entre 2006 y 2011 se perdió dinero o no se ganó.