La defensa del RUB por parte de Rusia probablemente resulte insuficiente

 | 16.12.2014 12:51

Rusia impactó a los mercados al elevar dramáticamente sus tipos de interés en mitad de la noche del lunes. Justo antes de la 1 A.M. hora de Moscú, el Banco Central subió las tasas desde el 10,5% al 17,0%, la mayor subida desde el desplome del mercado ruso de bonos en 1998.

Esta decisión enfatiza el brete en el que se halla Rusia. Con el dinero huyendo del país, el sistema bancario corre peligro de derrumbarse. El desplome de la moneda amenaza con elevar la tasa de inflación (ya en torno al 9%) hasta niveles intolerables. Además, las empresas que habían pedido crédito denominado en divisa extranjera se encuentran en serias dificultades.

La subida de tipos busca hacer que la tenencia de RUB resulte más atractiva, y detener de ese modo la depreciación. Desafortunadamente, esta estrategia tiene más éxito cuando el problema consiste en que los especuladores extranjeros toman prestado en una moneda a fin de venderla en corto. En el caso de Rusia, donde el problema es la fuga de capital doméstico, la subida de tasas de interés tan sólo empeora las cosas, ya que distribuye el dolor entre los deudores domésticos y hace que la economía se contraiga.

Creo que hará falta algo más que una subida de tipos de interés para estabilizar la moneda. En mi opinión, se necesitaría un suelo en los precios del petróleo y alguna resolución de las tensiones con Occidente en relación con Ucrania antes de que el capital se sienta atraído de vuelta hacia el país. Desafortunadamente, ambas metas siguen quedando lejanas.