Una semana de cambios

 | 10.01.2022 08:42

La lectura de las actas de la reunión de diciembre del FOMC dio por terminadas las alegrías que había traído el rally de navidad a los bolsillos de los inversores. Los consejeros de la Fed daban a entender que estaban valorando hacer un cambio en su política monetaria al reconocer que podrían comenzar próximamente con una reducción del balance del banco central, algo que va mucho más allá del mero tapering. Aunque matizaron después que se haría de forma pasiva, no reponiendo los activos a su vencimiento, provocó rápidas rotaciones en las carteras de renta variable hacia el sector financiero (+5,4%) y de energía (+7,2%), así como una notable subida de las rentabilidades de los Treasuries.

Como saben, mantenemos la tesis (consulte aquí la Visión de Mercado del 6 de septiembre) de que, para analizar correctamente la inyección de liquidez en el sistema financiero no basta con fijarnos en lo que sucede en el activo de su balance -a través de las compras de bonos-, sino que también hay que tener en cuenta la evolución del pasivo del banco central, en particular, con las operaciones de Repos Inversos que comenzaron en abril de 2021 y que tienen por objeto drenar liquidez del sistema financiero.