¿Quién en su sano juicio va a utilizar Libra, la nueva moneda de Facebook?

Por Jesse Cohen

Por si alguien no se ha enterado todavía, Facebook (NASDAQ:FB) anunció recientemente sus planes de lanzar un nueva criptomoneda mundial con el nombre de Libra.

La moneda dependería de la red Libra, fundada conjuntamente por varias empresas de los sectores tecnológico y de procesamiento de pagos, incluyendo Mastercard (NYSE:MA), PayPal y Uber (NYSE:UBER). Para facilitar las transacciones, Facebook también ha creado una nueva filial llamada Calibra, que sería la encargada de ofrecer las carteras digitales para Libra.

La filial sólo compartirá los datos de los usuarios con Facebook o con terceros en caso de tener consentimiento, o en "casos concretos" en los que sea necesario, según ha asegurado Facebook. Eso podría incluir el cumplimiento de la ley, la seguridad o la funcionalidad del sistema general.

Aún así, ¿alguien está dispuesto a utilizarla?

Más preocupantes aún son las posibles motivaciones de Facebook para plantearse entrar en el mercado de pagos.

Facebook se ha ganado a pulso recientemente su mala reputación. ¿De verdad va la gente a confiarle sus finanzas y el control de su dinero a Mark Zuckerberg, especialmente a la luz de las revelaciones del año pasado según las que Cambridge Analytica había accedido indebidamente a los datos de 87 millones de usuarios de Facebook?

Aunque tendremos que esperar a ver qué pasa, creo que la respuesta sería un no rotundo. Facebook  (NASDAQ:FB) ya sabe tanto de nosotros que lo último que necesita la empresa de redes sociales es aún más acceso, esta vez a nuestros hábitos de gasto online.

Para muchos, no merece la pena correr este riesgo.

Según la encuesta realizada a 1.000 usuarios por la web de finanzas personales MagnifyMoney en 2018, el 91% de los encuestados dijo que no confiarían en Facebook para gestionar sus pagos, una conclusión bastante esperada.

Facebook dice que el lanzamiento de Libra es parte de un esfuerzo no sólo para expandirse al ámbito del pago digital, sino también para ofrecer a los clientes no bancarizados de países desfavorecidos el acceso a servicios financieros por primera vez.

Sin embargo, el objetivo final que Facebook tiene en mente para Libra es integrar la moneda digital en las transacciones cotidianas, como abonar cuentas, pagar una taza de café o el transporte público.

Eso permitiría a la mayor red social del mundo, que cuenta con más de 2.000 millones de usuarios, combinar los datos de transacciones de un cliente con sus interacciones sociales y potencialmente venderlos al mejor postor.

Es por ello precisamente que los reguladores globales ya han hecho saltar las alarmas sobre la criptomoneda Libra de Facebook, y los legisladores estadounidenses han pedido a Facebook que suspenda su desarrollo mientras se investiga el concepto.

Muy tajante, la representante de la Cámara Maxine Waters emitió una declaración diciendo: "dado el turbulento pasado de la empresa, solicito que Facebook acuerde una moratoria sobre cualquier avance en el desarrollo de una criptomoneda hasta que el Congreso y los reguladores tengan la oportunidad de examinar estos temas y tomen las medidas necesarias".

Antes del comentado anuncio, Facebook ya se enfrentaba a importantes reacciones en contra del mal uso de los datos de usuario. Estas cuestiones son las que han llevado a algunos funcionarios del Gobierno a sugerir a Facebook que desista de sus planes.