Toys R Us arruinó a Toys R Us

Reuters  |  Autor 

Publicado 19.03.2018 07:55

Toys R Us arruinó a Toys R Us

Por Jennifer Saba

NUEVA YORK (Reuters) - (La autora es columnista de Reuters. Las opiniones expresadas son suyas)

Toys R Us está oficialmente quebrada. La cadena minorista de juguetes está liquidando más de 700 tiendas en Estados Unidos después de presentarse con las manos vacías ante un tribunal de quiebras. Aunque Amazon (NASDAQ:AMZN) tuvo algo que ver, los problemas fueron principalmente autoinfligidos. Los viejos modelos de negocio minoristas y los riesgos financieros sellaron el destino de Geoffrey la Jirafa.

En 2005, KKR (NYSE:KKR), Bain Capital y Vornado Realty Trust (NYSE:VNO) compraron el distribuidor de Barbies y Legos en una operación apalancada de 6.600 millones de dólares para sacarlo de la bolsa neoyorquina.

Pocos anticiparon entonces la crisis financiera que estaba por venir.

La especialidad de los fondos de capital riesgo es recortar costes y engordar la línea de ventas, pero entre enero de 2005 y enero de 2017, los gastos generales de la cadena subieron en unos 500 millones de dólares mientras las ventas crecieron unos míseros 385 millones.

Para más inri, Toys R Us tuvo que afrontar pagos de intereses de unos 500 millones de dólares por año. La deuda a largo plazo de la compañía suponía más de seis veces el Ebitda de la empresa el año pasado al situarse en unos 4.600 millones. Esto explica por qué Toys R Us tuvo una pérdida neta de 36 millones de dólares en 2017.

Las tensiones financieras también provocan dolor en otros focos.

Amazon, Walmart (NYSE:WMT) y Target (NYSE:TGT) entraron de forma agresiva en el segmento de los juguetes, recortando precios y redoblando esfuerzos en el comercio electrónico. No ayudó que Toys R Us la pifiase desde el primer momento en el negocio online con una asociación desastrosa con Amazon.

Tampoco que los dispositivos electrónicos hayan robado tiempo de juego a los niños en detrimentos de muñecas, coches de juguete y juegos de mesa. Toys R Us debería haber invertido significativamente para mantenerse al paso de sus rivales y de las demandas de los consumidores, pero lo que hizo fue recortar los gastos durante una década.