No hay pruebas de que bancos británicos cierren cuentas por motivos políticos, dice regulador

Reuters

Publicado 19.09.2023 15:25

Por Huw Jones

LONDRES, 19 sep (Reuters) - No hay evidencia hasta el momento de que los bancos británicos hayan estado cerrando cuentas por las opiniones políticas de sus clientes, aunque es necesario un escrutinio más detallado, dijo el martes la Autoridad de Conducta Financiera (FCA, por su sigla en inglés).

El ministro británico de Economía, Jeremy Hunt, pidió el mes pasado a la FCA que investigara urgentemente las cancelaciones de cuentas bancarias y sugirió que se multe a los prestamistas que hayan infringido la ley.

La práctica, conocida como "desbancarización", se convirtió en una cuestión política después de que el exlíder del partido Brexit, Nigel Farage, dijo que su cuenta en el banco privado Coutts, parte de NatWest, fue cerrada debido a sus opiniones políticas.

Un documento interno del banco presentado posteriormente por Farage mostró que la decisión se tomó en parte por sus opiniones, junto con consideraciones comerciales.

La polémica sobre el cierre de las cuentas provocó la salida de la directora general de NatWest, Alison Rose, y del director general de Coutts, Peter Flavel.

La FCA dijo el martes que examinó los datos de 34 bancos y sociedades, centrándose en julio de 2022 a junio de 2023, pero la velocidad de sus investigaciones significaba que había algunas lagunas, limitaciones e inconsistencias en la información proporcionada.

No fue posible presentar un conjunto inicial fiable de conclusiones sobre los grupos que probablemente se verán más afectados por las bajas, suspensiones y cancelaciones de cuentas.

"En consecuencia, la información que hemos recibido hasta ahora no sugiere que se hayan cerrado cuentas debido a las creencias u opiniones políticas expresadas legalmente por los titulares de las mismas", señaló la FCA en un informe.

"Las razones más comunes que dieron los proveedores para rechazar, suspender o cancelar una cuenta fueron, con diferencia, que estaba inactiva o que existía preocupación por la delincuencia financiera".

La FCA dijo que seguirá trabajando en los próximos meses con las empresas "atípicas", en particular con altos índices de cuentas rechazadas, para verificar los datos y comprender mejor las razones que subyacen, por ejemplo, al cierre de cuentas debido al riesgo para la reputación.

Andrew Griffith, ministro británico de Servicios Financieros, afirmó que la libertad de expresión es un derecho humano fundamental y tomó nota del informe inicial de la FCA.

"Está claro que queda más por hacer para validar las presentaciones de los bancos y garantizar que la FCA ha hecho un seguimiento exhaustivo de las perspectivas de los clientes desbancarizados", dijo Griffith.