Se prevé que el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda (RBNZ) mantenga el tipo de interés oficial en el 5,50% en su reunión del 22 de mayo, según los analistas de ING.
Los participantes en el mercado estarán muy atentos a las nuevas proyecciones económicas del Banco y a cualquier cambio en sus declaraciones prospectivas. A diferencia de sus homólogos, el RBNZ opera con anuncios de política menos frecuentes y se basa en datos trimestrales sobre inflación y empleo, que pueden dar lugar a rápidos cambios en su postura política.
La inflación en Nueva Zelanda ha sido persistentemente alta, con la inflación no comercial, un área particular de preocupación, registrando un 5,8% en el primer trimestre, superando la previsión del RBNZ del 5,3%. La tasa de inflación global fue del 4,0%, ligeramente por encima de la previsión del Banco del 3,8%.
Aunque el debilitamiento del mercado laboral sugiere una posible disminución de la inflación global hasta alrededor del 3,6% interanual para el segundo trimestre, se espera que el RBNZ vigile de cerca la inflación no comercial, donde los riesgos podrían seguir inclinándose al alza.
Los indicadores económicos muestran un panorama contrastado, con un debilitamiento del crecimiento y el empleo. La tasa de desempleo subió al 4,3% en el primer trimestre, el crecimiento salarial se desaceleró y el país se enfrentó a una recesión con una contracción del PIB del 0,1% intertrimestral.
A pesar de estos signos de enfriamiento de la economía, el hecho de que el RBNZ se centre exclusivamente en la inflación desde el cambio de su mandato en diciembre significa que estos factores pueden no influir directamente en sus decisiones políticas inmediatas.
Es probable que el RBNZ mantenga una postura agresiva en mayo, manteniendo en gran medida intacto su perfil de proyección de tipos. Esto indicaría que no hay reducciones de tipos y una pequeña posibilidad de otra subida de tipos en 2024, seguida de aproximadamente 75 puntos básicos de relajación en 2025.
Se espera que el Banco reitere la necesidad de que los tipos de interés se mantengan en un nivel restrictivo durante un período prolongado para que la inflación anual de los precios al consumo vuelva a situarse dentro del rango objetivo del 1 al 3 por ciento.
Aunque el RBNZ se muestra optimista sobre la posibilidad de que la inflación vuelva a situarse en el rango objetivo a finales de año, la probabilidad de recortes de tipos antes del cuarto trimestre se considera baja, dado el retraso de los datos y los riesgos persistentes de inflación no comercial.
No obstante, si la Reserva Federal flexibiliza en 75 puntos básicos como se prevé, el RBNZ podría considerar uno o dos recortes de tipos en el cuarto trimestre de 2024.
El dólar neozelandés (NZD), que ha subido un 3,7% desde principios de mayo, ha sido la divisa con mejor comportamiento, impulsado por los menores rendimientos estadounidenses, la mejora del sentimiento de riesgo y una política monetaria nacional que sigue ofreciendo un carry atractivo.
Aunque la decisión de mayo del RBNZ puede no tener un impacto significativo en el mercado, una reafirmación de su postura de línea dura podría llevar a una recalibración de las expectativas de tipos nacionales y reforzar aún más la posición del NZD.
Sin embargo, la trayectoria del dólar neozelandés seguirá estando estrechamente ligada a la política de la Reserva Federal y a los próximos datos económicos de Nueva Zelanda, que se publicarán el 16 de julio (IPC) y el 6 de agosto (informe de empleo), además de otra reunión del RBNZ prevista para el 10 de julio.
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