Por Valerie Volcovici
OTTAWA, 29 abr (Reuters) - El mundo sigue dividido sobre las metas para su primer tratado sobre los plásticos, por lo que los países se plantean celebrar una serie de reuniones más acotadas antes de llegar a un acuerdo en diciembre.
Los países todavía tienen que decidir si el tratado debe exigir la reducción de la cantidad de plásticos producidos en las conversaciones que finalizan el lunes.
Durante la última semana de negociaciones en Ottawa, más de 60 países exigieron que el tratado incluyera topes a la producción.
Ruanda y Perú, junto con la Unión Europea, Noruega, Ghana y otros Gobiernos autodenominados Coalición de Alta Ambición, afirmaron que los negociadores deberían dedicar los próximos meses a estudiar si es posible reducir algunos tipos de plásticos.
Con una producción de plásticos que va camino de triplicarse para 2050, tales niveles "son insostenibles y superan con creces nuestras capacidades de reciclaje y gestión de residuos", dijo la negociadora jefe de Ruanda, Juliet Kabera.
Ruanda y Perú han propuesto un proceso para establecer niveles de referencia de la cantidad de plástico necesaria y utilizada en cada país para evitar la sobreproducción, y afirman que esta aportación será útil para orientar el tratado final.
Algunos países productores de productos petroquímicos, como Arabia Saudí y China, se oponen firmemente a estos esfuerzos, pues sostienen que sería mejor dedicar el tiempo que queda hasta la cumbre final de Busan a temas como la gestión de los residuos plásticos.
El principal negociador chino en Ottawa, Yang Xiaoling, afirmó que los países deberían "centrarse en temas no conflictivos", como el rediseño de los productos para que utilicen menos plástico o sean más fácilmente reciclables.
(Reporte de Valerie Volcovici; edición en español de Javier López de Lérida)