Por Stephanie van den Berg
LA HAYA, 30 abr (Reuters) - Fiscales de la Corte Penal Internacional han entrevistado al personal de los dos mayores hospitales de Gaza, según dijeron dos fuentes a Reuters, la primera confirmación de que los investigadores de la CPI estaban hablando con médicos sobre posibles crímenes en la Franja de Gaza.
Las fuentes, que pidieron no ser identificadas debido a lo delicado del tema, dijeron a Reuters que los investigadores de la CPI habían tomado declaración a personal que había trabajado en el principal hospital de la ciudad de Gaza, en el norte del enclave, al-Shifa, y en el principal hospital de Jan Yunis, en el sur, Nasser.
Las fuentes se negaron a dar más detalles, alegando preocupación por la seguridad de los posibles testigos.
Una de las fuentes dijo que los acontecimientos en torno a los hospitales podrían formar parte de una investigación de la CPI, que conoce de causas penales contra individuos por crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, genocidio y agresión.
La oficina del fiscal de la CPI no quiso hacer comentarios sobre cuestiones operativas en investigaciones en curso, alegando la necesidad de garantizar la seguridad de víctimas y testigos.
Sin embargo, la CPI ha dicho que está investigando a ambas partes en el conflicto, incluido el ataque del 7 de octubre de combatientes de Hamás contra Israel y la posterior ofensiva israelí en Gaza.
La oficina del primer ministro israelí no respondió inmediatamente a la solicitud de comentarios. El director del hospital Nasser de Gaza tampoco respondió a la solicitud de comentarios y no se pudo contactar con el director de al-Shifa. Un portavoz del Ministerio de Sanidad de Gaza tampoco respondió a la solicitud de comentarios sobre cualquier investigación de la CPI con el personal.
Durante el conflicto, los dos principales hospitales de Gaza han sido objetivos israelíes de alto nivel: rodeados, asediados y asaltados por fuerzas israelíes que acusaban a milicianos de Hamás de utilizarlos con fines militares, lo que Hamás y el personal médico niegan.
En los últimos días, responsables palestinos también han exigido investigaciones tras la exhumación de cientos de cadáveres en fosas comunes en Nasser. Las dos fuentes no pudieron precisar si dichas fosas formaban parte de algún interrogatorio.
Israel niega haber cometido crímenes de guerra, incluso en hospitales de Gaza o sus alrededores, donde afirma que todas sus actividades militares se han justificado por la presencia de combatientes de Hamás.
Los hospitales están protegidos en tiempo de guerra por tratados internacionales, lo que puede convertir los ataques contra ellos en crímenes de guerra, tal y como lo estipula la CPI, aunque pueden perder esta protección en algunas circunstancias si son utilizados por combatientes de forma perjudicial para el enemigo.
Israel no es miembro de la CPI, mientras que los territorios palestinos fueron admitidos como Estado miembro en 2015. La CPI afirma que esto le otorga jurisdicción sobre las acciones de cualquier persona, incluidos los soldados israelíes en los territorios palestinos, y de los palestinos en cualquier lugar, incluido el territorio israelí. Israel no reconoce ninguna jurisdicción de la CPI sobre sus ciudadanos.
Cualquier caso penal de la CPI sería independiente de un caso en la Corte Internacional de Justicia, o Corte Mundial, que fue presentado por Sudáfrica y acusa a Israel de genocidio en Gaza, algo que Israel niega. La CIJ, también con sede en La Haya, atiende demandas entre Estados, mientras que la CPI atiende causas penales contra particulares.
PRECEDENTE PELIGROSO
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó el viernes que cualquier medida de la CPI no afectaría a las acciones de Israel, sino que "sentaría un precedente peligroso que amenaza a soldados y figuras públicas".
"Bajo mi liderazgo, Israel nunca aceptará ningún intento de la Corte Penal Internacional de La Haya de socavar su derecho básico a defenderse", escribió en Telegram.
Combatientes de Hamás atacaron Israel el 7 de octubre, matando a 1.200 personas y capturando a 253 rehenes, según cálculos israelíes. Israel respondió con un ataque en el que, según las autoridades sanitarias palestinas, mató al menos 34.000 personas, y se cree que hay miles de cadáveres más perdidos bajo los escombros.
Yael Vias Gvirsman, abogada que representa a algunas víctimas israelíes, dijo en febrero que algunos de sus clientes habían prestado testimonio directamente a los investigadores de la CPI, lo que indica que la investigación de la CPI sobre los atentados del 7 de octubre ha ido avanzando.
(Información de Stephanie van den Berg y Anthony Deutsch en La Haya; información adicional de Ali Sawafta en Ramala; editado por Edmund Blair y Peter Graff; editado en español por Mireia Merino)