El martes, los analistas de ING han proyectado que el índice del dólar estadounidense (DXY) es probable que mantenga sus niveles actuales, con un rango de consolidación entre 105,75 y 106,50. A pesar de este periodo de estabilización, mantienen una perspectiva alcista sobre la divisa.
El dólar ha interrumpido recientemente su trayectoria alcista y ha entrado en una fase de consolidación tras las ganancias de la semana pasada. Esta semana, la atención del mercado se centra en la próxima publicación del índice de precios del consumo personal básico (PCE) de marzo, un indicador clave de la inflación que podría influir en los rendimientos a corto plazo del Tesoro estadounidense. Los inversores se sienten especialmente atraídos por los rendimientos del Tesoro estadounidense a dos años, que actualmente se encuentran en un atractivo 5% a la luz de las actuales incertidumbres geopolíticas.
Los analistas de ING sugieren que es improbable que la publicación hoy del índice de gestores de compras (PMI) de abril en EE.UU. y de los datos de ventas de viviendas nuevas afecte significativamente a la evolución del dólar. También mencionan la posibilidad de una intervención a gran escala en el mercado de divisas por parte de los bancos centrales asiáticos, que podría estar disuadiendo a los inversores de aumentar sus posiciones largas en el dólar.
El rango de consolidación indicado por ING refleja un periodo en el que se espera que el dólar fluctúe dentro de estos niveles antes de reanudar potencialmente su movimiento alcista. La declaración del Director Global de Mercados y Regional de ING destaca que, si bien los datos inmediatos pueden no influir significativamente en el dólar, el contexto económico más amplio y las intervenciones podrían desempeñar un papel en su trayectoria.
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