MADRID (Reuters) - La Comisión Nacional del Mercado de Valores presentó el lunes el informe trimestral sobre estabilidad financiera en España en el que constata que "el indicador de estrés continúa en un nivel bajo" pese a la situación en Cataluña, aunque advirtió de los riesgos si la tensión se prolonga en el tiempo.
A principios de octubre el indicador de estrés, que analiza la evolución de los distintos riesgos financieros e identifica las principales fuentes de los mismos, se situaba en 0,15 puntos frente a 0,19 a finales del trimestre anterior.
"Los mercados españoles se han mantenido en un nivel bajo de estrés durante los últimos meses (...) a pesar de que en octubre el indicador ha registrado un leve repunte, probablemente relacionado con la crisis política en Cataluña, pero de una magnitud no comparable a episodios anteriores de crisis en los mercados".
Las tensiones entre el gobierno central y el catalán han pasado factura a los mercados y provocado la fuga de un millar de empresas que han trasladado su sede social fuera de la región en el último mes.
El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, pidió el sábado autorización al Senado para una aplicación rigurosa del artículo 155 de la Constitución previsto para el supuesto de que una comunidad no cumpla sus obligaciones o las leyes y dijo que destituirá al Ejecutivo regional, intervendrá el Parlament y convocará elecciones regionales antes de seis meses.
RIESGOS SI LA SITUACIÓN SE ALARGA
"A medio plazo, la prolongación de esta crisis puede tener consecuencias notables sobre los mercados y la actividad económica", reconoce el regulador en un informe cuando habla de la situación en Cataluña.
En concreto, señala que se puede producir un encarecimiento en las condiciones de financiación que dé lugar a descensos en las cotizaciones y rebrotes puntuales de la volatilidad.
En cuanto al impacto sobre la actividad económica, el regulador la reconoce "difícil de cuantificar", pero señala que existen algunos indicadores "que muestran ya revisiones a la baja en los beneficios esperados por acción de varias sociedades cotizadas durante los próximos doce meses".
"En este escenario es posible que algunos proyectos de inversión puedan verse retrasados o, incluso suspendidos", señala en informe.