Viena, 22 feb (EFE).- El Gobierno austríaco anunció hoy que
introducirá en 2012 ó 2013 un impuesto especial para el sector
bancario con el que pretende recaudar 500 millones de euros anuales
que financien eventuales planes futuros de rescate del sector.
El canciller federal, el socialdemócrata Werner Faymann, anunció
hoy tras una cumbre con los responsables de los principales bancos
austríacos, que ha acordado con sus socios democristianos la
introducción del impuesto pese al rechazo de las entidades
financieras.
En una rueda de prensa conjunta con el líder democristiano y
ministro de Finanzas, Josef Pröll, el jefe de Gobierno explicó que
como primer paso se creará un grupo de trabajo para elaborar los
detalles del nuevo impuesto, con el que el Estado pretende ingresar
unos 500 millones de euros al año con un impuesto del 0,07 al 0,1
por ciento de los activos bancarios.
Para Faymann un impuesto a la banca es "irreversible", mientras
que Pröll dijo que es cuestión de "justicia" que el sector bancario
haga una aportación a la recuperación económica tras la crisis.
El Estado austríaco desembolsó en los dos últimos años más de
7.000 millones de euros en ayudas directas y otros 100.000 millones
en forma de garantías para rescatar a los bancos de la república
alpina, afectados por la crisis financiera y por su fuerte
exposición en el mercado bancario de Europa del Este.
Andreas Treichl, director del Erste Bank (participado en un 10
por ciento por La Caixa española), se mostró hoy desilusionados por
el nuevo impuesto, cuya introducción consideró como "inevitable"
debido el aparente acuerdo político al respecto.
Otros banquero, Ludwig Scharinger, jefe del banco Raiffeisen de
Alta Austria, calificó el impuesto como un "peligro" para Austria
como plaza financiera y defendió como alternativa un impuesto
internacional sobre las transacciones financieras.
Ante el anuncio de hoy, varios economistas austríacos advirtieron
de que los bancos podrían aumentar los precios de sus créditos y de
sus servicios como respuesta a nuevo impuesto. EFE