Bruselas, 10 may (.).- El banco neerlandés ABN Amro (AS:ABNd) registró un beneficio neto de 523 millones de euros en el primer trimestre de este año, lo que supone un 77 % más con respecto a las ganancias de 295 millones que obtuvo en el primer trimestre de 2022, debido, principalmente, a los mayores ingresos por intereses.
Así, el margen neto de intereses de la entidad aumentó un 24 %, desde los 1.310 millones del pasado año hasta los 1.620 millones registrados entre enero y marzo de este año, un crecimiento observado "en todas las unidades de clientes" y que se debe especialmente al "incremento significativo" de los ingresos por depósitos.
Teniendo en cuenta los 444 millones de euros en ingresos procedentes de tasas y comisiones y los 24 millones de otras actividades, el resultado operativo de ABN Amro en el primer trimestre del año ascendió a 2.142 millones de euros, un 10,8 % más.
El consejero delegado de la entidad, Robert Swaak, subrayó el "sólido rendimiento" del banco en el primer trimestre del año a pesar de las recientes "turbulencias" financieras a las que los bancos de la eurozona respondieron con "resiliencia" y "altos colchones de capital" y gestión "conservadora" de la liquidez".
"Seguimos vigilando los efectos a largo plazo de la persistente y elevada inflación. Los préstamos se están haciendo cada vez más caros y ya están afectando al mercado de vivienda de Países Bajos", advirtió Swaak por el lado negativo.
Con todo, la rentabilidad financiera de la entidad (ROE) se situó al final de marzo en un 9,6 %, lo que supone un incremento con respecto al dato del último trimestre de 2022 pero también más de cuatro puntos menos si se compara con la registrada entre julio y septiembre del pasado año.
En cuanto a los ratios de capital, el ratio CET1, el de capital de máxima calidad, alcanzó el 15 %, dos décimas menos que en el semestre precedentes y siete décimas menos si se compara con el registrado en el primer trimestre de 2022.
Por su parte, los créditos concedidos aumentaron en 5.500 millones, hasta los 249.400 millones de euros en el primer trimestre, debido principalmente a un aumento de 4.500 millones en el segmento de créditos profesionales.
Por el lado del pasivo, los depósitos de clientes se redujeron apenas un 1,6 % entre enero y marzo de este año, hasta los 227.279 millones de euros, sobre todo por el saldo negativo de la cuentas corrientes, que se redujeron desde los 113.000 millones a 31 de diciembre hasta los casi 103.000 millones al cierre del primer trimestre.
Los títulos de deuda emitida, por su parte, aumentaron en 4.000 millones y alcanzaron la cifra de 60.300 millones debido a un incremento de la financiación a largo plazo de la entidad.
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