Madrid, 30 nov (.).- La constructora española OHLA (antigua OHL (BME:OHLA)) perdió 88,8 millones de euros hasta septiembre, frente a los 57,3 millones que ganó en el mismo periodo del año anterior, debido a los efectos contables extraordinarios derivados de la recapitalización de deuda llevada a cabo en 2021.
Sin embargo, según ha informado este miércoles el grupo controlado por los hermanos mexicanos Amodio a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), sus ventas crecieron un 15,5 %, hasta alcanzar los 2.344 millones, gracias a la buena evolución de sus negocios de construcción y servicios.
Hasta septiembre, casi el 72 % de la facturación correspondió al negocio exterior.
Por áreas geográficas en las que OHLA opera, Europa fue responsable del 45,9 % de la cifra de negocio, frente al 36,8 % de Norteamérica y el 16,4 % de Latinoamérica.
Por negocios, la compañía obtuvo unos ingresos de 1.957 millones a través de la construcción, un 21,4 % más; por delante de servicios, con 287,4 millones y un crecimiento interanual del 9,3 %; e industrial, que facturó 80,7 millones, tras caer un 42,3 %.
La contratación del grupo (obra nueva y ampliaciones) alcanzó los 3.127,4 millones, un 20,5 % más que en los primeros nueve meses de 2021, concentrada mayoritariamente en Europa y Estados Unidos, con un 80 % del total.
Entre los proyectos adjudicados, destacan los 2.210 millones de la construcción a través de una Unión Temporal de Empresas (UTE) del proyecto "P3 Purple Line Light Rail", en Maryland (Estados Unidos).
La cartera total de la compañía a cierre de septiembre, casi toda a corto plazo, ascendía a 7.027,1 millones, un 21 % más que hace un año, de los cuales Europa aglutina el 40,6 %, EEUU el 38,1 % y Latinoamérica el 20,2 %.
El resultado bruto de explotación (ebitda) alcanzó los 70,3 millones, un 16,6 % más que el año anterior.
La liquidez de la compañía se situó en 568,1 millones, mientras que el endeudamiento bruto se rebajó hasta los 475,8 millones.
OHLA, que ha reducido su endeudamiento en cerca de 300 millones en los últimos dos años, tiene previsto anunciar a finales de enero de 2023 una nueva amortización parcial de bonos procedente de los cobros aplazados de la antigua oficina de Guerra de Londres (Old War Office).